Fue una madrugada que valió la pena. Desde las 4:00 a.m. del pasado sábado, voluntarios de la Fundación Dr. Clown PTY se movilizaron desde la capital hacia cuatro poblados de la montaña capireña.
A las 6:30 a.m. ingresaron por El Espino de La Chorrera. Atrás dejaron dos horas y media de carretera desde la vía Interamericana para llegar a Marganao, el punto de encuentro.
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Allí una delegación empezó a caminar y otros se motivaron al encuentro con los moradores. En tanto, las donaciones llegaron en dos vehículos que lograron entrar, pese a lo fangoso del terreno en esa zona.
Juvencio Bernal fue uno de los beneficiados con la entrega de bolsas de alimentos. En nombre de su familia, agradeció llevando legumbres de su huerto.
Otra vecina lo vio y llevó un gajo de pipas y hasta guineos maduros y verdes.
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En Teriá Nacimiento se dejaron 27 bolsas de alimentos, mientras que para Caracoral fueron 24. Había que regresar, pues esta ayuda canalizada por los payasos humanitarios, donantes anónimos y el Club de Leones de Campana también tenía que alcanzar a otros.
Es así como en Gaitas Arriba y La Negrita, 50 familias recibieron este beneficio, portando su mascarilla y guardando el distanciamiento social recomendado por las autoridades.
24
Familias en Caracoral.
27
Familias en Teriá Nacimiento.
25
Familias en Gaitas Arriba.
25
Familias en La Negrita.
Muchos héroes anónimos se sumaron a esta causa y en menos de una semana reunieron todos los alimentos que les iban a enviar. Las familias beneficiadas agradecieron con su sonrisa, verbalmente y hasta compartiendo algo de lo que producen en sus pequeñas fincas.